Parroquia Cristo Redentor

Blog del párroco

Cree su cuenta para poder comentar las entradas. Además tendrá acceso a secciones exclusivas y quedará suscrito a nuestros envíos por correo electrónico.


  • 2016-07-08 8:58 PM | P. Ángel Ciappi (Administrator)

    Queridos hermanos y hermanas:


    El ejercicio de la misericordia debe ser un rasgo distintivo e indiscutible de un discípulo de Jesús. La conocida parábola del Buen Samaritano nos presenta a un sacerdote y a un levita que son incapaces de un acto de amor que implique riesgos y para ello encuentran buenas excusas. Sin embargo, el samaritano que podía alegar que el hombre asaltado y medio muerto era su enemigo por ser judío, se estremece ante la necesidad del caído y asume responsabilidad personal por el herido. No sólo le presta los primeros auxilios, sino que se involucra personalmente en su cuidado y además se compromete con sus recursos hasta lograr la recuperación total. Jesús nos hace caer en cuenta que “prójimo” no es el otro sino yo mismo en cuanto “me hago prójimo”. En otras palabras, cualquier persona que se encuentre en mi camino y que esté pasando necesidad, él es el prójimo al cual le debo abrir mi corazón y prestarle auxilio. ¡Hay tantos rostros empobrecidos y moribundos esperando que nos hagamos su prójimo! En tu vida, ¿de quién te haces prójimo?, ¿de quien no?


    Consejo de la semana: En estos días en los que me encuentro fuera de la parroquia, tenemos hermanos sacerdotes que celebran las Misas en el fin de semana. Te invito a que le agradezcas personalmente al sacerdote que celebra la Misa su disponibilidad y generosidad para servir a nuestra comunidad. Déjale saber lo que significa para ti y tu familia poder celebrar y comulgar en tu propia parroquia, sin tener que acudir a otra. Y reza también por él.


    Gracias por ser parte de nuestra familia de fe. Dios te bendiga abundantemente.


    P. Ángel

  • 2016-07-01 8:46 PM | P. Ángel Ciappi (Administrator)

    Queridos hermanos y hermanas:


    Como vemos en el evangelio de hoy, Jesús formó a sus discípulos para que fueran misioneros. Tu y yo necesitamos dejarnos formar por Jesús continuamente para ser sus misioneros en todo momento y lugar. El Papa Francisco en el número 10 de su Exhortación “La alegría del Evangelio”, citando el Documento de Aparecida, nos dice: «la vida se alcanza y madura a medida que se la entrega para dar vida a los otros. Eso es en definitiva la misión» (360). Aprender de y con Jesús a recibir la vida como don y a darla como don a los demás es lo que nos hace discípulos misioneros, no espectadores sino verdaderos miembros de la Iglesia que es «una Iglesia en salida», como nos dice el Papa en el número 20 de su Exhortación: «Cada cristiano y cada comunidad discernirá cuál es el camino que el Señor le pide, pero todos somos invitados a aceptar este llamado: salir de la propia comodidad y atreverse a llegar a todas las periferias que necesitan la luz del Evangelio». Y puntualiza en el número 21: «La alegría del Evangelio que llena la vida de la comunidad de los discípulos es una alegría misionera». ¿De qué manera en Puerto Rico, tan golpeado por la violencia y el sufrimiento, podemos ser misioneros(as) que lleven paz y alegría a nuestra sociedad? ¿Qué pasos podemos dar? ¿Qué pasos debemos dar como comunidad de fe?


    Consejo de la semana:  Reflexiona en tu oración personal sobre tu pertenencia a la Iglesia, a tu comunidad parroquial. Te invito a pensar: ¿Qué frutos estoy obteniendo de mi participación? ¿Qué frutos quisiera obtener? ¿Qué estoy dando de mi vida la comunidad? Te invito a descubrir que hay una estrecha vinculación y proporción entre lo que damos y lo que recibimos. Para ello, revisa tus capacidades y destrezas y decide cual de ellas quisieras compartir con la comunidad. Contacta a alguno de los coordinadores de ministerios (su información está siempre en la página 3 del boletín) para conversar sobre como puedes integrarte para ser parte de una «Iglesia en salida» y comenzar a recibir dando.


    Gracias por ser parte de nuestra familia de fe. Dios te bendiga abundantemente.


    P. Ángel

  • 2016-06-24 8:54 PM | P. Ángel Ciappi (Administrator)

    Queridos hermanos y hermanas:


    Jesús nos invita hoy a reflexionar y evaluar el “costo” de ser su discípulo. El “negarse a sí mismo” para vivir la voluntad de Dios que vimos el domingo pasado implica examinar nuestros apegos, nuestras prioridades y nuestra jerarquía de valores. ¿Qué debo dejar para seguir a Jesús más de cerca (siendo más fiel a la voluntad de Dios)? ¿Qué debo poner primero en el uso de mi tiempo y mi dinero? ¿A qué debo darle la mayor importancia en mi vida?


    Consejo de la semana:  Te invito a dialogar con Dios en la oración tu participación concreta en la comunidad de fe para ver si es conforme a Su voluntad. Para discernir a qué nos llama el Señor es necesario repasar los talentos que nos ha dado (habilidades, conocimientos, relaciones, recursos, etc.) y ver también las necesidades concretas que hay en nuestra comunidad parroquial (por ejemplo, alto número de envejecientes, niños sin formación religiosa, hogares que no han sido visitados por la parroquia para vincularlos a nuestra comunidad de fe, desempleados, enfermos de cáncer). Jesús nos aclaró que al final de nuestra vida seremos juzgados en el amor, es decir, en el servicio generoso y desinteresado a los demás. Este amor no se puede confundir con acciones serviciales, sino que consiste en un estilo de vida que se adquiere poco a poco con la ayuda de Dios, que con paciencia infinita espera que demos los pasos necesarios. ¿Te animas?


    Gracias por ser parte de nuestra familia de fe. Dios te bendiga abundantemente.


    P. Ángel

  • 2016-06-18 8:20 AM | P. Ángel Ciappi (Administrator)

    Queridos hermanos y hermanas:


    Como preparación al momento de la decisiva revelación de su identidad, del anuncio de su pasión y de la consecuencia de ésta para la vida de sus discípulos, Lucas apunta que Jesús “estaba orando solo” (9,18a). La oración a solas con su Padre le permite a Jesús seguir fielmente Su voluntad, no sólo porque le abre a captarla sino porque en la oración experimenta el amor de su Padre y esto le lleva a confiar plenamente en el Padre y su plan, sin aferrarse a sus criterios y deseos. Gracias a la oración continua a solas con su Padre, Jesús puede “negarse a sí mismo” no haciendo su voluntad sino la de su Padre. ¿Y tu y yo?


    Consejo de la semana:  Para recibir la comunión en la boca primero se responde en voz alta con un “Amén” al ministro que, con la hostia consagrada en la mano, nos dice “El cuerpo de Cristo”.  Luego se abre la boca y se saca la lengua, para que el ministro pueda colocar el cuerpo de Cristo en la lengua. Para recibir la comunión en la mano primero se responde en voz alta con un “Amén” al ministro que, con la hostia consagrada en la mano, nos dice “El cuerpo de Cristo”.  Luego se coloca la mano derecha debajo de la izquierda (o la izquierda debajo de la derecha si la persona es zurda) y se espera a que el ministro coloque el cuerpo de Cristo en la mano.  Entonces con la mano de abajo se toma y se lleva a la boca.  Esto se hace dando la cara al ministro antes de retirarse al asiento.


    Gracias por ser parte de nuestra familia de fe. Dios te bendiga abundantemente.


    P. Ángel

  • 2016-06-10 6:22 PM | P. Ángel Ciappi (Administrator)

    Queridos hermanos y hermanas:


    En el relato evangélico de hoy se contraponen la lógica de Dios y la lógica de los hombres.  Para los hombres, especialmente los fariseos, ultra cumplidores de la Ley, la santificación proviene de su esfuerzo por cumplir los preceptos. Por tanto, deben esforzarse en cumplirlos todos y a la perfección.  Lograr esto les da seguridad y les hace sentirse superiores a los pecadores, sobre todo públicos, quienes –según los fariseos– por no cumplir la Ley están apartados de Dios. De ahí que los fariseos deban mantenerse separados (esto es lo que significa la palabra fariseo) de los pecadores, para no “contaminarse” ni “alejarse” de Dios. Jesús, por el contrario, busca a los pecadores. Les invita a acercarse a Él y a acoger su perdón, experimentando que la santificación no se alcanza por nuestros actos sino por dejar a Dios obrar en nuestra vida, y que la apertura a la acción de Dios comienza por reconocer nuestros pecados y dejarnos perdonar por Él. La mujer pecadora se ha reconocido como tal y ha sido perdonada. Porque mucho se le ha perdonado, mucho ama. A Simón, que se cree sin pecado, poco o nada se le ha perdonado y por eso no ama, sino que desprecia a Jesús. ¿Clasifico a las personas entre los que “merecen” y los que “no merecen” perdón, que los trate, que los sirva? ¿Me parezco más a Simón o a Jesús?


    Consejo de la semana:  Siempre en bueno revisar a mitad de año nuestro aporte económico a la comunidad parroquial, pues conviene que guarde relación con: (a) las fuentes de ingreso que Dios nos concede, (b) nuestro crecimiento espiritual, que nos llevará a estar cada vez más agradecidos de la bondad de Dios y de sus dones inmerecidos, y (c) nuestro nivel de pertenencia a la comunidad de fe, la parroquia.


    Gracias por ser parte de nuestra familia de fe. Dios te bendiga abundantemente.


    P. Ángel

  • 2016-06-03 8:25 PM | P. Ángel Ciappi (Administrator)

    Queridos hermanos y hermanas:


    Hoy el Evangelio nos contrasta a Jesús, Señor de la Vida, que entra en el pueblo de Naín, con el cortejo fúnebre de un joven hijo de una mujer viuda, todos impotentes ante la muerte, que sale de Naín. La misericordia de Jesús le lleva a cambiar muerte en vida, sufrimiento en gozo para este joven y para su madre viuda, desamparada totalmente. Y Jesús hace esto con el poder de su Palabra viva y eficaz, que hace lo que dice. El pasaje de hoy nos enseña que cuando Dios entra en contacto con la muerte, la transforma en vida.  ¿Qué instancias de muerte podría transformar hoy Dios en vida y en nuestros ambientes familiar, laboral, social? También nos enseña que dejarse poner en contacto con la Palabra de Dios y su fuerza divina es condición para ser transformados según la voluntad de Dios. ¿Te pones en contacto con la Palabra de Dios diariamente por espacio de al menos media hora? ¿Qué transformaciones –“muerte en vida”– has podido ver en ti?


    Consejo de la semana:  Cada vez que visites la parroquia para celebrar la Misa, sobre todo los fines de semana, date la oportunidad de silenciarte y reposarte antes de que comience la celebración. Prepárate haciendo tu oración del día en tu hogar antes de venir a la Misa. Llega temprano y visita el Santísimo en la Capilla por espacio de al menos cinco minutos. Esto hace posible preparar nuestras personas (espíritu, mente, cuerpo) para celebrar, en lugar de solamente asistir u oír. Verás la diferencia.


    Gracias por ser parte de nuestra familia de fe. Dios te bendiga abundantemente.


    P. Ángel

  • 2016-05-25 2:45 PM | P. Ángel Ciappi (Administrator)

    Queridos hermanos y hermanas:


    En los últimos dos domingos hemos celebrado la comunión eclesial que es fruto del Espíritu (Pentecostés) y la comunión trinitaria como modelo y fundamento de toda comunión (Santísima Trinidad). Este domingo celebramos la comunión eucarística con Jesús (Corpus Christi, el Cuerpo de Cristo). «Sacramento de la caridad, la Santísima Eucaristía es el don que Jesucristo hace de sí mismo, revelándonos el amor infinito de Dios por cada hombre. En este admirable sacramento se manifiesta el amor “más grande”, aquel que impulsa a “dar la vida por los propios amigos” (cf. Jn 15,13)… En el Sacramento eucarístico Jesús sigue amándonos “hasta el extremo”, hasta el don de su cuerpo y de su sangre» (Benedicto XVI, Sacramentum Caritatis No.1). Jesús sale a nuestro encuentro en la Eucaristía en calidad de servidor. Nos alimentamos de la Eucaristía para dejar a Jesús salir en nosotros al encuentro de los hermanos en calidad de servidor. ¿Cómo quiere servir Jesús a los hermanos que me rodean?


    Consejo de la semana:  Te invito a repasar en tu oración personal la conexión entre Eucaristía y servicio que se da en tu vida. ¿De qué modo Jesús Eucaristía se convierte en Jesús Servidor en tus palabras y acciones concretas? Repasa también en tu vida la relación entre Eucaristía y comunidad. ¿De qué modo Jesús Eucaristía en ti te acerca a los hermanos? ¿Qué acciones concretas en tu vida son acciones de comunión, que fomentan comunidad?


    Gracias por ser parte de nuestra familia de fe. Dios te bendiga abundantemente.


    P. Ángel

  • 2016-05-20 6:40 PM | P. Ángel Ciappi (Administrator)

    Queridos hermanos y hermanas:


    Jesús nos dice que el Espíritu “recibirá de lo mío y os lo anunciará (transmitirá) a vosotros” (Jn 16,14c.15c). La vida que está en el Padre y en el Hijo y que sólo les pertenece a ellos, y todo lo que cabe en la relación entre el Padre y el Hijo será comunicado por el Espíritu a los discípulos. Es el Espíritu —Dios mismo vaciándose en nosotros— quien coloca en lo más hondo de nuestro ser al Ser mismo de Dios, un Ser que es comunión de Personas en el Amor. Por eso Jesús puede decirnos: “Todo lo que tiene el Padre es mío” (16,15a), porque en la comunión todos se entregan lo que son y tienen: “Todo lo mío es tuyo y todo lo tuyo es mío” (17,10). Esta manera de ser trinitaria es el modelo de toda comunidad, familia, parroquia, Iglesia. ¿Señala mi modo de vivir que creo en un Dios que es comunión de Personas en el Amor?


    Consejo de la semana:  Creer en un Dios que es Trinidad de Personas, comunión en el Amor, implica creer que la plenitud no se alcanza en solitario sino que supone “entregar” lo que se es y tiene al servicio del otro para buscar su bien. Como parte de tu vida en comunidad en la parroquia, ¿qué te pide Dios que “entregues” para servir tanto en el templo como en el territorio parroquial? ¿Qué servicios concretos, en qué tiempos y con qué recursos te pide el Señor que le dejes prestar a través tuyo?


    Gracias por ser parte de nuestra familia de fe. Dios te bendiga abundantemente.


    P. Ángel

  • 2016-05-13 4:27 PM | P. Ángel Ciappi (Administrator)

    Queridos hermanos y hermanas:


    En una reunión ecuménica en Upsala, el patriarca metropolitano oriental dijo estas palabras: “Sin el Espíritu Santo Dios es lejano. El Evangelio es letra muerta. La autoridad de la Iglesia es una dominación. La liturgia es pura evocación. El actuar de los cristianos es una moral de esclavos. Pero cuando el Espíritu Dios está presente, el Evangelio es Espíritu y Vida, la autoridad de la Iglesia es servicio, la liturgia es conmemoración y anticipación de lo esperado, y el actuar cristiano es deificado”. Para ti, en tu experiencia de vida ¿es el Evangelio letra muerta o Espíritu y Vida?, ¿es la autoridad en la Iglesia dominación o servicio?, ¿es la liturgia evocación vacía o actualización de lo acontecido y anticipación de lo prometido?, ¿es el actuar cristiano una moral de esclavos o una manifestación del poder de Dios?


    Consejo de la semana:  Examina tu vida para ver hasta que punto te interesa recibir el don del Espíritu Santo, cuya solemnidad celebramos hoy, Domingo de Pentecostés. ¿Das prioridad en tu vida a la escucha de la voz de Dios y su Espíritu por medio de la oración y meditación de la Palabra y los “signos de los tiempos” o te entregas frecuentemente a conversaciones improductivas o incluso pecaminosas, a consumir medios de comunicación indiscriminadamente, a desperdiciar el tiempo y los dones que Dios te regala en caprichos, perezas o proyectos personales al margen de Dios y su voluntad?


    Gracias por ser parte de nuestra familia de fe. Dios te bendiga abundantemente.


    P. Ángel

  • 2016-05-04 3:24 PM | P. Ángel Ciappi (Administrator)

    Queridos hermanos y hermanas:


    La Ascensión de Jesús a los Cielos expresa que su humanidad ha entrado en el mundo divino. Así como la Encarnación inaugura en el mundo humano la revelación de la divinidad, en la Ascensión vemos lo que será la situación definitiva de la humanidad en el mundo divino. Jesús nos ha precedido en la morada eterna y el estado definitivo, para darnos esperanza firme de que donde está Él, cabeza y primogénito, estaremos también nosotros, sus miembros. Su presencia gloriosa continuará hasta el fin del mundo en los que le amen y guarden su Palabra, y seguirá estando presente como el alma de la comunidad de los que viven la comunión con Él. Esta presencia es posible por el Espíritu Santo (la Promesa del Padre) quien reviste a los discípulos y a la comunidad del poder de Dios (la fuerza de lo alto) para llevar a cabo el anuncio con palabras y con obras.


    Consejo de la semana:  Examina tu vida para ver hasta que punto te interesa recibir el don del Espíritu Santo, cuya solemnidad celebraremos el próximo Domingo de Pentecostés. ¿Buscas limpiar de tu vida frecuentemente los pecados, es decir, las desviaciones voluntarias de lo que sabes que es voluntad de Dios? ¿Dejas que la Palabra te interpele? ¿Practicas el examen de conciencia diario antes de acabar el día? ¿Acudes a la confesión regularmente, al menos una vez al mes?


    Gracias por ser parte de nuestra familia de fe. Dios te bendiga abundantemente.


    P. Ángel

Enlaces


Copyright © 2024 Parroquia Cristo Redentor
Urb. El Paraíso, 140 Calle Ganges, San Juan, Puerto Rico 00926
T. 787-946-1999   |   CE. pcr@arqsj.org

               

Powered by Wild Apricot Membership Software