Queridos hermanos y hermanas:
Jesús, desde el corazón misericordioso del Padre, nos ve “como ovejas que no tienen pastor”. Él sabe que sin la guía y la ayuda de Dios, sin la experiencia cotidiana de Su amor la criatura queda a merced de sus solas capacidades y fuerzas y, por tanto, víctima del mal. ¿En qué aspectos de mi vida estoy como oveja sin pastor? Sin Jesús la criatura no tiene oportunidad de llevar a cabo un proyecto de vida digno del ser humano, es decir, un proyecto de vida en comunión con Dios y con sus hermanos. Por eso Jesús no escatima esfuerzos, a pesar del cansancio tanto para educar al pueblo como para formar a su grupo de colaboradores con los cuales compartirá la misión de educar al pueblo. ¿En cuál de los dos grupos me encuentro yo? En el evangelio de hoy vemos que parte de esa educación es lograr el equilibrio entre misión y oración, trabajo y descanso. ¿Cómo estoy viviendo este equilibrio en mi vida diaria?
Consejo de la semana: El descanso debe ser un cambio en las ocupaciones ordinarias por otras con más tiempo para compartir con la familia y los amigos, estrechando los vínculos de comunión, y no un simple no hacer nada o perder el tiempo. Te invito a repasar qué haces habitualmente para descansar y a dialogar con el Señor en la oración qué sería necesario ajustar.
Gracias por ser parte de nuestra familia de fe. Dios te bendiga abundantemente.
P. Ángel